Se trata de una colonia agrícola que comenzó a edificarse en la última década del siglo XIX, más concretamente en 1868.
En el pasado tuvo gran importancia. La Colonia de Santa Eulalia vivió un verdadero esplendor en los albores del siglo XX, cuando el Conde de Alcudia y Gestalgar, Antonio de Padua Saavedra, y su esposa doña María Avial Peñas, vizcondesa de Alcira, regentaban las productivas tierras que eran cultivadas por un buen número de asalariados, quienes disponían de sus propias casas construidas alrededor de la masía señorial.
Con el paso del tiempo, la mayoría de los habitantes de la Colonia se han ido trasladando a otros lugares debido a la decadencia que ha ido experimentando y la pedanía ha sufrido el abandono por parte de las instituciones pese al importante valor histórico de su patrimonio arquitectónico.
Construida en la última década del siglo XIX, esta antigua población agrícola estaba compuesta por un magnífico conjunto formado por el Palacio de los Condes, el casino, las almazaras, las bodegas, las fábricas de harina y de alcohol, el Teatro Cervantes, el economato, la administración de correos y telégrafos, la estación de ferrocarril, casas de los trabajadores, la hospedería y la ermita. La ermita primitiva de origen medieval, después de numerosas reparaciones fue derruida y en 1891 se levantó la nueva, de planta rectangular.
Actualmente a causa del deterioro, algunos de los edificios de la Colonia han ido desapareciendo, como es el caso de la estación de ferrocarril o el teatro. En la actualidad, un grupo de inversores británicos está llevando a cabo la rehabilitación de los edificios y la construcción de una urbanización.
En 2007, una productora valenciana la eligió como "plató" de exteriores para la popular serie de Canal 9 "L'Alqueria Blanca", un impulso tanto a nivel social como turístico.