La mandarina es el fruto del mandarino. Pertenece al grupo de frutos llamados hesperidios y su pulpa está formada por un considerable número de gajos llenos de jugo; el cual contiene mucha vitamina C, flavonoides y aceites esenciales.
La mandarina es el cítrico más parecido a la naranja, aunque de menor tamaño, sabor más aromático y con mayor facilidad para quitar su piel. Por eso se considera una de las frutas más apreciadas.
En España, las mandarinas se clasifican en cuatro grandes grupos: Clementinas (Citrus reticulata, var. Clementina), Clemenvillas, Híbridos y Satsumas (Citrus unshiu).
* Clementina Fina, un fruto de extraordinaria calidad de tamaño pequeño o medio, con un peso entre 50 y 70 gramos. Recolección: entre noviembre y enero.
* Oroval, tienen forma redondeada y un peso que oscila entre los 70 y 90 gramos. La corteza es granulosa y fácil de pelar. Recolección: de noviembre a diciembre (no es recomendable su conservación en el árbol ya que pierde zumo y tiende a hincharse).
* Clemenules, tienen el fruto de tamaño grande (80-100 gramos) con forma algo achatada. Su pulpa resulta jugosa, fácil de pelar y carece prácticamente de semillas. Recolección: de noviembre a enero.
* Otras variedades muy similares a las anteriores y sin semillas son la Clemenpols, Oronules y Esbal.