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Sin lugar a dudas, Jimena de la Frontera, población serrana del interior del Campo de Gibraltar, se ha convertido en los últimos años en un punto de encuentro para el turismo rural y alternativo, así como para los practicantes del senderismo que buscan bellas y tranquilas rutas, alejadas de las aglomeraciones de otros destinos cercanos y agobiados por el turismo de masas.
Este pueblo de 10000 habitantes está en pleno parque natural de Los Alcornocales, rodeado de magníficos bosques de alcornoques en un excelente estado de conservación, así como numerosas e importantes cuevas rupestres de alto valor, destacando «Laja Alta», la cual consta sólo de un abrigo, con forma de concha y abierto a levante, midiendo aproximadamente unos cinco metros de ancho por tres metros de fondo y de alto.Las pinturas las encontramos en la zona derecha de la cavidad, se intuye que habrían más en la izquierda, pero las inclemencias meteorológicas debieron de acabar borrándolas. De todas las pinturas destacan las de los barcos, un total de ocho, con altas proas y velas en forma triangular.
Pero si es conocida esta población en los últimos años es por sus jornadas micológicas, unas de las más importantes a nivel andaluz y nacional, ya que en sus bosques podemos encontrar una variedad increíble de setas de todos los tamaños y gustos.
Para los amantes del senderismo, Jimena ofrece una gran variedad de rutas tanto para iniciados como para la familia.Para poder realizarlas, lo mejor es llegarse por el punto de información, instalado a las faldas del Castillo y en donde podremos encontrar planos y croquis, así como la guía «Andar por el Campo de Gibraltar» donde también se recogen dichas rutas.
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