En el estanque del Palacio de Cristal de El Retiro de Madrid hay una auténtica plaga de galápagos que además de contaminar gravemente el agua, están generando mal olor.
Lo que el principio pudo tener su gracia se está convirtiendo en un grave problema.
Aquí os presento a un ejemplar de unos 30 cm de longitud con una malformación que está encogiendo y curvando su caparazón, impidiéndole mover las patas.
Es una lenta y triste agonía.
El día que lo vi avisé al personal de seguridad, pero no sé si habrán hecho algún caso.