Esta mañana he conocido a Tito Pinto, un curioso personaje de origen chileno, que ha sido músico en Brasil y Argentina, y que fabrica instrumentos musicales, como estos sacos andinos de caña que, doy fe, suenan en sus manos como un saxo afinado en clave de sol.
Le he comprado uno [15€] y ya os contaré si progreso adecuadamente.