Me atrevo a decir que esta es la foto más divertida que he hecho en mi vida.
Os cuento: esta tarde volvía con un par de amigos de ver el campamento de la Puerta del Sol cuando me encuentro en una terraza de una cafetería con un grupo de chicos extranjeros todos vestidos de Wally (el de ¿Dónde está Wally) con sus camisetas a rayas rojas y blancas y el gorro de lana en los mismos tonos.
Me paré delante de ellos, sonreí y saqué mi cámara señalándola. Esperaba que me sonrieran a su vez o que agitaran los brazos... Pero lo que hicieron fue desperdigarse por la terraza.
Los primeros instantes me quedé desconcertado, pero entonces me di cuenta: estaban escondiéndose, ocultándose, mimetizándose como hace Wally en sus historietas.
Fue una situación muy divertida y especial.
Tengo la sensación de que ya lo habían hecho antes o de que al menos lo habían hablado.