El pruno se cultiva por su valor ornamental, para embellecer parques y jardines, especialmente situado junto a muros.
Son flores rosaceas (es decir de cinco petalos), de color rosado o blanco, dobles o sencillas.
No suele pasar los 2 metros de altura, de porte abierto, con ramas aguzadas de color marrón rojizo. Posee hojas dentadas, con tres lóbulos en la parte superior, con aspecto aterciopelado por el envés. Las flores, rojas o blancas, pueden ser sencillas o dobles, según la variedad, aisladas o en grupo creciendo a lo largo de toda la rama, por lo que en primavera, cuando surge la floración, el arbusto ofrece un magnifico aspecto. Las flores aparecen en la planta antes que las hojas.