..."y aquí mismo ante mis ojos tocas la flor diminuta del diente de león
y la florecita amarilla comienza a abrirse
Porque si los gusanos se alegran se menean en el pantano y te saludan
y en el monte los monos saltarines te alaban con sus piruetas
cómo no he de alabarte yo que tengo entendimiento
cómo no he de arrodillarme en esta piedra para hacerte zalemas
aunque los pájaros burlonamente me silben
aunque me ladre alebrestado mi perro".
José Manuel Arango