...Tal vez mi última morada sea en algún nubarrón,
o si consigo el perdón y Dios me hace la gauchada,
en mis pampas fachinadas dormirá mi corazón,
y el día que clave la guampa y mi cuerpo se agusane,
el día que se desgrane la espiga de mi osamenta,
sólo Dios me hará la cuenta porque a él le entrego mis vales.
Por eso m'hijo, la herencia que yo le pueda dejar,
si es que le llega a quedar de mis deudas un haber,
si no las quiere perder, Dios se la ha de administrar,
a lo mejor queda un saldo de errores que cometí,
si llegara a ser ansí, no tenga empacho en decirlo,
tal vez llegue a maldecirlo si me quisiera encubrir,
no niegue mi voluntad por más que adentro le duela,
encubrir es mala escuela por eso la estoy negando,
si yo viví equivocando no quiero ser sanguijuela.
No sé si podré dejar algo que pueda servir,
Sé que no puedo parir por haber nacido macho,
pero no olvide muchacho que yo ayudé a concebir,
por eso m'hijo, repito que consejos no le doy,
el canto que canto hoy y el canto que ayer canté,
mañana lo cantaré de puro criollo que soy.
José Larralde
"Herencia pa` un hijo gaucho"