El otro día fui testigo de un cortejo entre palomas realmente divertido. El palomo, que es el de más tamaño, estuvo persiguiendo incansable a su Paloma, que se hacía la estrecha y se alejaba constantemente de él.
Desde luego el chico iba en serio... No sé cómo acabarían porque me fui aburrido de tanto acoso y porque se me pasaba la hora del parking.