El patio de los leones es uno de los rincones más emblemáticos del monumento nazarí.Su nombre procede de los doce leones surtidores de la fuente que ocupa el centro del patio, leones sobre los que descansa la gran taza de forma dodecagonal y que la rodean. Mandado construir por Mohamed V, de planta rectangular y rodeado por una galería a modo de claustro cristiano, sostenido por 124 columnas de mármol blanco y fino fuste, los cuales presentan en su parte superior multitud de anillos, y sostienen capiteles cúbicos y grandes ábacos, decorados con inscripciones y ataurique.La fuente está siendo restaurada, pero el lugar tiene detalles de inmensa belleza.