El río mediterráneo mejor conservado del planeta. No cuenta en todo su curso con ninguna presa artificial de importancia, la pureza de sus aguas ha sido siempre única y la diversidad de hábitats y especies hacen de este río una auténtica joya, aunque estos últimos años están apareciendo problemas (antes desconocidos) de contaminación que repercuten seriamente en la población de Barbos, Madrillas y Truchas.
Es de los pocos ríos españoles en los que aún se conserva el cangrejo autóctono y no puede olvidarse la presencia en estas agua de la Nutria.