Este hermoso pajarito me despertó el día sábado 8 de diciembre mientras estaba durmiendo. Desperté por su aleteo ya que no podía salir de mi pieza.
Busqué la cámara, lo tomé con mis manos y me puse a disparar (sin flash ya que lo podía confundir o que se yo), hasta que me dirigí al patio y lo solté... pero por culpa de la cadena trófica y de que "el grande se come al mas chico", la pobre avecita sucumbió ante mi perro que lo estuvo persiguiendo hasta que finalmente lo mató.
Es triste, cuando uno quiere hacer una buena obra las fuerzas externas se encargan que no resulte.