Al pie mismo de los Picos de Europa, en Fuente Dé (a 1.094 m), hay un teleférico que salva los 753 metros de desnivel que hay hasta el Mirador del Cable (a 1847 m). El mirador es un auténtico balcón que da al vacío (no apto para los que tengan vértigo) y desde él que se domina una panorámica increíble. Desde allí se accede a los puertos de Aliva, extensas praderías en el corazón de los Picos de Europa, a mil quinientos metros de altura, y a las que sólo se puede acceder mediante el teleférico en un par de minutos o a pie o en todo terreno desde Espinama por una empinada pista de 8 Km. Una vez en Aliva se pueden recorrer numerosas rutas puesto que en su entorno hay seis senderos de Pequeño Recorrido (PR). Desde el Mirador del Cable, sale un sendero que se divide en dos rutas: El Naranco de Bulnes y el Refugio de Aliva.