El Palacio de Invierno en San Petersburgo fue entre 1732 y 1917 la residencia oficial de los Zares. Se encuentra entre el río Nevá y la Plaza del Palacio. Es el cuarto que se construyó y sufrió continuas remodelaciones entre fines de 1730 y 1837, cuando fue seriamente dañado por un incendio.
El palacio fue construido con el objetivo de ser reflejo de la grandeza y el poder de la Rusia Imperial.
Numerosos arquitectos, entre ellos Bartolomeo Rastrelli, diseñaron el palacio en lo que se denominó el estilo barroco isabelino.
Durante un breve tiempo, en 1917, el palacio fue la sede del Gobierno Provisional Ruso, liderado por Alexander Kerensky.
Hoy forma parte, junto con otros cinco edificios más, del Museo Hermitage.