¿Cómo es el aspecto de una persona? ¿Cuáles son las características especiales de una
persona y qué indica su postura? ¿Sorprendes a alguien tomando espontáneamente una
fotografía o, en su lugar, le das de antemano instrucciones específicas? Te indicamos todas
las circunstancias que has de tener en cuenta a la hora de fotografiar a personas. Sea cual
sea la situación, intenta realizar la fotografía “alejado del centro” para variar y no la tomes
justo en el medio. No te limites a pensar en pedir a la persona cuyo retrato vas a hacer que
cambie de postura, sino hazlo también tú mismo. Tú eres quien determina el ángulo más
favorable o creativo. La cámara plasmará lo que tú has descubierto en alguien.

¡Muévete! 

Supongamos que alguien tiene papada. Lo normal es que no quieras acentuar ese rasgo.
Toma la fotografía desde un ángulo ligeramente más alto. Sigue observando la postura de la
persona. Muchas personas tienen tendencia a “lanzar” su cabeza hacia atrás, especialmente,
cuando ríen. Pídeles que bajen su barbilla ligeramente. Esto es una buena técnica para realizar
una fotografía más atractiva de una persona. También querrás que sean los ojos los que
destaquen en la imagen. Después de todo son más expresivos que la barbilla. En el caso de
una persona de poca estatura, o cuando se trata de niños, dobla las rodillas para agacharte y
ponerte a su nivel. Fotografía todo lo posible a la altura de los ojos y no dejes de moverte.

Para hacer una foto diferente sitúa a la persona que vas a retratar
en la sombra. Esto permitirá realizar una fotografía con iluminación
suave. Las sombras, o un día nublado, producen una luz más
acogedora y difusa. Lo que, a su vez, produce un retrato más suave.
Es habitual asociar calidez con el sol. Eso es cierto si se habla de
temperatura. Pero la luz del sol produce altos contrastes y sombras
sobre el rostro. Además, las personas suelen guiñar los ojos cuando
están expuestas directamente a la luz solar y eso no suele producir
una expresión natural.

Los niños son uno de los sujetos más gratificantes
para fotografiar. Pero no suelen cooperar o, por el
contrario, cooperan demasiado. Bajo la influencia
del “momento oficial”, pueden adoptar una pose
forzada. A los niños más pequeños incluso les
llega a asustar. Hasta puede que se marchen en
el preciso momento en que vas a disparar. En
resumen: un retrato natural y espontáneo de un
niño no es nada fácil de conseguir. La solución
suele ser elegir la distracción correcta en el
momento oportuno. 

Crea una atmósfera amistosa 

Los padres son ideales para distraer a un niño.
Haz que uno de los padres esté colocado de
pie diagonalmente detrás de ti con su cara a la
misma altura que la cámara. Si un niño encuentra
que todo es demasiado atemorizante, buscará
automáticamente el contacto visual con su padre
o madre. Puesto que ellos están de pie junto a ti,
es justo como si el niño mirara al objetivo.
Si no hay ningún padre cerca, llama su atención
con un juguete y no dejes de hablarle.

CONCENTRATE EN LOS OJOS

Es por algo por lo que los ojos de las personas son conocidos
como las “ventanas del alma”. Son la parte más importante
de un retrato. Es por eso por lo que siempre es vital enfocar
cuidadosamente los ojos de una persona. Comprueba si la
cámara enfoca adecuadamente en esta posición. La mayoría de
las cámaras muestran los puntos de enfoque en el visor o en la
pantalla. Aunque también es posible cambiar estos puntos.
Esto permitirá fotografiar con más precisión.

En la oscuridad las pupilas se dilatan. Por ello los ojos pueden
aparecer de color rojo en una fotografía bajo la influencia de la
luz de un flash. Para evitar esto, pon el flash en el modo de “flash
para reducción de ojos rojos”. Se encuentra en el menú estándar
de la mayoría de las cámaras compactas. La cámara produce un
breve flash pequeño justo antes del disparo real. En el momento
en el que se toma realmente la fotografía, las pupilas ya están
considerablemente contraídas y ya no se produce el efecto de ojos
rojos, o bien se reduce considerablemente. Ten en cuenta que el
flash tiene un alcance mínimo y máximo.

Deseas que la atención se centre en la persona que estás fotografiando,
no en el fondo. Por ello, has de ser consciente de que ese fondo influye
en la fotografía. Si deseas expresar calma en un retrato, elige un fondo
neutro y anodino.

Si hay poca luz o si deseas evitar zonas de sombra sobre el rostro de una persona
bajo una luz solar intensa, puedes añadir luz extra. Utiliza una cartulina blanca,
poliestireno o una pantalla reflectora profesional. Esto capturará la luz y la reflejará
en la dirección deseada sobre el rostro.

Pantallas reflectoras 

La técnica descrita anteriormente es también apropiada para rellenar y neutralizar
zonas oscuras de la piel (no sólo sombras sino también en el caso de arrugas o
flacidez). También puedes situar a una persona junto a una ventana para reflejar
la luz que entra sobre la parte de la cara que precise más iluminación. Prueba
estas técnicas desde diferentes ángulos y posiciones. Si encuentras que es
demasiado complicado, también puedes utilizar el flash de relleno para las zonas
oscuras de la cara. Comprueba la cámara para ver si el flash está encendido.
Este método también funciona bien con el contraluz.