La iglesia catedral “Nuestra Señora del Rosario “, verdadera joya arquitectónica es motivo de orgullo para los Goyanos. Cuando en el año 1806 se estableció el trazado regular del pueblo, el Sr. Juan Francisco Soto, dono un terreno que corresponde al actual emplazamiento del templo y se comenzó la construcción de una capilla bajo el amparo de “Nuestra Señora del Rosario”, patrona y protectora de Goya. Dicha construcción consistió en levantar paredes de ladrillos sin torres, pero con un campanario formado por un maderamen sostenido por 4 postes de palmeras y tenían una sola nave. En 1857 una comisión de vecinos emprende la construcción del templo con las dimensiones actuales, tomando como parte la edificación actual. Fue inaugurado solemnemente el 15 de Agosto de 1884. El 10 de Abril de 1961 el Papa Juan XXIII por medio de una bula crea la Diócesis de Goya y la eleva al honor de ser sede de su Obispado. Dicho templo consta de 62 metros de largo, 25 metros de ancho y 18 metros de alto en su nave central, posee dos torres que alcanzan los 35 metros; el templo es obra del Arq. Francisco Pinaroli. El costo del altar mayor fue de 3.000.000 Pesos oro, fue costeada por unas pocas personas pudientes de dicha ciudad; fue realizado por Carlos Pibernat. En cuanto a la imagen de la Virgen del Rosario colocada en el altar es de 2 metros de alto y fue traída de España y donada a la Iglesia por Pibernat. La cofradía del Carmen, costeó el altar de la nave norte y el altar de la cabecera, realizado en mármol de Carrara, dedicado a la Virgen de las Mercedes, fue donado en 1860 por la Sra. Julia Rolon y Rubio y pudo ser colocado en su lugar a la terminación del templo en 1884. El púlpito es totalmente tallado y dorado, con la imagen de los 4 evangelistas y el corazón de Jesús en el medio, esto es un recuerdo que el Padre Luís Niella dejara de su pecunio a este templo. Por su parte la Señora Carolina Ocanto de Rolon, donó las 14 estaciones del Vía Crusis. En la torre del lado norte se colocó un reloj público, donado por la familia de José Soto. La torre sur contaba con 2 gigantes campanas totalmente realizadas en bronce. En el interior del templo se encuentran pinturas de alto valor, que se deben al destacado pintor de origen alemán, especializado en arte sacro, el Señor Francisco Luscher, quien en esa época se radicaba en Jujuy. Trasladado a Goya, pintó los murales en el mismo sitio en que habrían de ser vistos y que aún hoy adornan el techo abovedado de la Catedral; en la bóveda central desde la puerta hacia el altar mayor: 1) La anunciación; 2) Maria visita a su prima Isabel; 3) El nacimiento y la adoración de los Santos Reyes Magos; 4) La ascensión de Maria; 5) La Santísima Trinidad; y en las columnas de ambos lados del prebisterio: al norte; la presentación del niño Jesús en el Templo y el sur; Jesús con los Doctores de la Ley. La Iglesia Catedral ha sido inspirada en la basílica de Novara (Italia), de arquitectura corintia y estilo romántico.