Diecinueve estudios de arquitectura y diseño de diversos lugares del mundo están detrás de un hotel de cinco estrellas que acaba de abrir sus puertas en la Avenida de América madrileña. Su nombre, 'Puerta de América', evoca las relaciones que hubo con el continente que descubrió Colón e intenta expresar el crisol de nacionalidades que lo ha hecho posible. De Jean Nouvel a Zaha Hadid, de Arata Isozaki a Javier Mariscal. Las mezclas no dejan impasible, a pesar de las críticas a la fachada de colores chillones, obra de Nouvel. La diversidad, desde luego, lo convierte en un museo. Pero con una característica especial. En éste, si se dispone de un bolsillo generoso, se puede dormir.